Personajes: Michiko Daimon (46), Hiromi Jonouichi (43), Akira Kanbara (75), Hideki Kaji (58), Kondo Shinobu (47), Takashi Ebina (59), Takano Naoki (64), Mamoru Hara (48), Takashi Torii (58), Hikaru Morimoto (38), Shigatetsu Hiruma (71).
Capítulo
1: Hideki Kaji ¿El Nuevo Director General?
Michiko Daimon, la médica cirujana que nunca falla y,
considerada por algunos como la misteriosa “Doctora X”, últimamente se había
hecho de una reputación tan mala entre los hospitales universitarios que ya
nadie la quería entre su personal, así que la pobre mujer ya no sabía qué hacer
con su vida ni con su tiempo, quebrada económicamente y enloquecida por la
abstinencia de no haber realizado ni una sola cirugía en el último mes.
Tirada melodramáticamente sobre un sillón pardo de una
plaza, no pudo hacer otra cosa que entregarse a su mala fortuna y exhalar un
largo suspiro de desesperación.
—¡¡¡Aaay!!! ¡Siento que voy a morir! ¡Si no realizo
pronto una cirugía, perderé la razón y mis grandes habilidades!
—Tan modesta
como siempre —se burló la médica anestesista Hiromi Jounouchi con la suavidad
que la representaba, sin quitar la vista de una revista médica que estaba
leyendo, sentada en el otro sillón.
—Eso le pasa por tener malos modales y ser muy grosera.
Ya nadie la soporta… —se quejó su viejo representante, Akira Kanbara a la vez
que acariciaba el suave pelaje de su gato—. ¡Así no pagarás tu deuda, Michiko!
—¡Necesito operar a quien sea o me volveré loca! —se
quejó la aludida, ignorando olímpicamente a sus amigos. De pronto, fijó sus
ojos en la inocente mascota de su empleador, como si de una presa se tratara.
Alarmado, Akira volvió su cuerpo de perfil en un
intento de ocultar al pobre felino entre sus brazos.
—¡Ni se te ocurra, Michiko! ¡Te prohíbo que le pongas
las manos encima a Ben Casey!
—Esto se está poniendo serio… —murmuró la anestesista,
dejando la revista en la mesita que estaba al lado del sillón y disponiéndose a
ponerse de pie.
—No te preocupes, Akira-chan, yo nunca fallo —caminó
hacia él como un zombie.
—Ahora me está dando miedo… —gimió Hiromi, llevándose
la mano a la boca, asustada.
—¡No, Michiko, no! —levantó al pobre felino amarillo
sobre su cabeza para que la desesperada cirujana no se lo quitara de las manos.
—¡Vamos, Akira-chan! ¡No tardaré nada! —insistió la
aludida, estirando los brazos hacia el aterrorizado animalito—. ¡Juro que
venderé mi alma al diablo si no realizo una cirugía ahora mismo!
Girando ambos personajes como si de un vals se tratara,
comenzaron a caminar rápidamente alrededor de la pequeña sala bajo los
sombrados ojos de Hiromi hasta que el asustado animal arañó las manos de su amo
para que lo soltara y salió disparado hacia la puerta de calle que justo en ese
momento se abrió permitiendo que el gato se escabullera entre las piernas del
recién llegado, provocando que éste se cayera sentado con bastante fuerza bajo
el dintel de la puerta.
—¡Ouch! ¡Mi espalda! ¡Oye, demonio! ¿Hasta en tu casa
debo soportar tu mala educación?
—¡Oh! ¡No puede ser! —exclamó Hiromi, reconociendo
inmediatamente a la persona que se estaba poniendo trabajosamente de pie, sacudiéndose
el polvo del elegante sobretodo.
—¡Kaji-chan! ¿Qué estás haciendo aquí? —quiso saber
Michiko, olvidándose momentáneamente de su síndrome de abstinencia.
—¡Que no me diga Kaji-chan! —replicó furioso el
aludido, entrando a la casa después de haberse sacado los zapatos y puesto las
pantuflas de visita.
Por toda respuesta, la cirujana bufó fastidiada y
metió las manos a los bolsillos.
—¿Se puede saber qué estás haciendo aquí? No estoy de
humor, y si me vienes a cobrar por tus condenadas mandarinas de hace siglos, no
tengo ni para comprar una rama de apio.
—¿Y acaso cree que yo estoy de humor con semejante
recibimiento? ¿Eh? ¡Por poco me mata Ben Casey! —replicó molesto, deteniéndose
frente a Michiko—. ¿Qué le quería hacer? ¿Embalsamarlo? Ahora sabemos de dónde
saca sus “extraordinarias” habilidades.
—No exageres, Kaji-chan, sólo quería realizarle una
pequeña cirugía y no quiso mostrarse colaborativo… —se cruzó de brazos, girando
la cabeza hacia otro lado.
—¡Ja! ¿Usted pidiendo colaboración? ¿Usted? ¡Y no me
diga Kaji-chan, demonio!
—¡Entonces no me digas “demonio”, soy Daimon! —lo
fulminó con la mirada.
—¡Demonio!
—¡Daimon!
—¡Demonio!
—¡Daimon!
—¡Qué bueno! —Festejó la anestesista, batiendo las
palmas de sus manos—. ¡Se nota que por fin se volvieron grandes amigos!
—¡Jamás! —le respondieron ambos al unísono,
asesinándola con la mirada, por lo que Jounouichi, muerta de miedo, tuvo que
refugiarse detrás de su representante.
—Inmaduros… —murmuró molesta.
—Escúchame, Michiko, no puedes pelearte de ese modo
con tu nuevo contratista, recuerda que me fue muy difícil encontrarte trabajo y
que aún me debes una buena suma de dinero… Te lo gastaste todo y no dejaste
nada para tu futuro —le advirtió Kanabara.
—¿Y qué tiene que ver él con todo esto…? —de pronto,
lo entendió, se le cayó la mandíbula, abrió los ojos como platos y se volvió
lentamente hacia el recién llegado.
El médico cirujano autoproclamado “genio de la
laparoscopía”, Hideki Kaji, sonrió entre triunfante y burlón.
—Comienza mañana mismo en mi hospital, doctora
Michiko Daimon —declaró.
Viendo el episodio 8 de la segunda temporada de este serie, se me ocurrió escribir este fic. Obviamente no esperen que sea perfecta en lo que escriba, sobre todo en los asuntos médicos de los cuales trataré de investigar antes de escribirlos en el fic. De momento no existirá el romance en esta historia, y si alguno de ustedes lo pides, lo pensaré. Les advierto que más adelante habrá mucha acción y desesperación pero sin provocar la muerte de nadie que no lo merezca. ¡No puedo alejarme de la acción y la aventura!
Si no les gusta, no lean ni comenten, olvídense de este fic y sigan tranquilos con las otras publicaciones del blog. Pero, siendo éste un fic, pueden tirar ideas a ver hasta dónde llegamos XD Los personajes que usaré son de las dos primeras temporadas, como no he visto las demás temporadas y no las veré hasta que Christ las edite, no quiero atreverme con personajes que no conozco.
Comenzaré a ver el drama coreano Big, sigo viendo el anime One Piece, leyendo la novela histórica de misterio La Venganza de Nofret de Ágatha Christie y editando el drama coreano Papá es Extraño.
Vi las películas Cura Siniestra y Life Vida Inteligente.
Muy interesante , me quede con las ganas de que Michiko le hiciera algo al gato pero ya seria muy gore xd , Me gusto bastante, estare esperando el Sabado la otra parte :3
ResponderBorrar¡Ah! ¡Sabía que iba gustar la escena del gato! je je XD
BorrarMuchísimas gracias por comentar amigo, me hiciste muy feliz, me traes viejos recuerdos de cuando escribía fics en Fanfiction... snif... La gente no sabe lo importante que son las opiniones de los lectores para nuestro ego de escritor aficionado... snif... ¡Gracias, gracias! ¡Muchas gracias! ¡Haré mi mejor esfuerzo! :-( :>)